
Que no por eso no pienso, siempre rondado están, lejos, cerca, más allaíto, más pacaíto, y tó' eso por medio peso, que el euro está caro y se me caen las greñas por las ventanas que veo el sol del invierno que no quiere llegar y amenaza con aumentar el porciento de intereses de su estadía para disminuir las inversiones en el extranjero para que no se quemen los autos en Paris y el agua deje de correr en New Orleans.
Que no me quejo, cojo por donde no hay suelo y pienso, siempre, pienso en algo más lejos: labios, ojos, dientes, manos, zapatos, azulejos, cuadros, colores y playa, vaya que raya. Pantallas, faldas, rizos, pómulos, Car, ca, ja, das.... das sin esperar recibir nada a cambio, sólo un cambio.
Que me cabe todo en el colorao que llevo dentro, que no me quejo.
Texto : M.A.